UN DÍA DE SOL
Era un día de sol. Lucas tenía la tarde libre y muchas ganas de jugar a la pelota...
Vino el amigo llamado Yonatan que vivía en la esquina de su casa. Se fueron al club Boca Juniors a las 6 de la tarde. Lucas y Yonatan jugaron unos penales. Ellos encontraron una llave cerca de una puerta. Yonatan la agarró y abrió la puerta despacio. Los dos entraron corriendo hacia la puerta. Estaba todo muy oscuro. Había un pozo y no lo vieron. Entonces cayeron en él. Era muy hondo y al final del pozo había un cartel que decía “Bienvenidos al mundo fantasma“.
Ellos vieron que los fantasmas tenían cuatro patas, tres cabezas y un ojo gigante. Lucas se acercó a uno de los fantasmas y le dijo: - ¿Quiénes son ustedes?.
El fantasma respondió: -no somos malos. Nosotros, nomás ayudamos a los perdidos.
¡Ah…, que bueno! Dijo Lucas. - ¿Saben que mi amigo Yonatan y yo estamos perdidos? ¿Nos pueden ayudar a volver a nuestras casas?
Y los fantasmas dijeron: - Por supuesto que los vamos a llevar a sus casas. Los cinco fantasmas acompañaron a Lucas y Yonatan a sus casas.
Finalmente, los dos amigos se despidieron del grupo y volvieron a su casa, luego de prometerse que guardarían el secreto para siempre.
Autores: Christian, Franco, Lucas